La habitación y el baño son muy grandes, perfectos para una estancia cómoda. El salón cuenta con todas las comodidades para cocinar, con fregadero, frigorífico, microondas, etc. No se puede pedir más.

Me sentí muy bien recibido, no me puedo quejar.

Las vistas desde la casa son maravillosas. El dueño muy amable y te da a probar el txakoli que él elabora. Además, la ubicación es perfecta para visitar la zona y el señor que atiende es muy amable y recomienda lugares de interés y restaurantes.

Nuestra estancia en El Txakoli Hostal fue muy agradable. La habitación era espaciosa, al igual que el baño, y teníamos un salón completamente equipado donde podíamos cocinar. No nos faltaba de nada, con fregadero, frigorífico, microondas, y más. ¡No se puede pedir más! Además, teníamos acceso a las zonas comunes y nos sentíamos como en casa. El propietario siempre estaba dispuesto a ayudarnos y resolver nuestras dudas. Las vistas desde la casa eran maravillosas y había un buen espacio en la parte trasera para que los niños jugaran. El dueño también era muy amable y nos invitó a probar su delicioso txakoli.

De verdad, no hay nada que no me haya gustado 😊

La ubicación es perfecta para explorar varias ciudades del País Vasco en poco tiempo, a solo 30 km de Vitoria y 40 km de Bilbao. Además, las habitaciones son grandes y cuentan con baños espaciosos. El salón y la cocina están bien equipados con todo lo necesario para cocinar, incluyendo fregadero, frigorífico y microondas.

Había problemas de limpieza en el alojamiento, con telas de araña y falta de higiene en las habitaciones y baños. Además, se escuchaba el ruido de los trenes pasar ya que el hotel está cerca de las vías.

La habitación era amplia y el baño también estaba bien equipado. Además, las zonas comunes del hotel eran acogedoras y se podía utilizar la cocina sin problemas. me gustó la disposición y amabilidad del propietario para resolver dudas y ayudar con cualquier petición.

El acceso al hotel era complicado y el aparcamiento resultaba incómodo. Además, el ruido de los trenes que pasaban cerca era molesto, especialmente por las noches.

La ubicación de El Txakoli es perfecta, ya que se encuentra a una corta distancia de Vitoria y Bilbao, lo que facilita recorrer varias ciudades del País Vasco en poco tiempo. Además, cuenta con espacios comunes y la disponibilidad de utilizar esa parte de la casa como si fuera nuestra. El propietario, José Fernando, se muestra dispuesto a resolver dudas y apoyar propuestas.

Hay algunos aspectos negativos a considerar. El acceso y el aparcamiento no son sencillos, y tampoco cuentan con aire acondicionado, lo que nos obligó a dormir con las ventanas abiertas y sufrir la invasión de mosquitos.

Vistas maravillosas y amplio terreno para que jueguen niños. Propietario muy amable, te ofrece probar su txakoli casero. Bien ubicado para visitar varias ciudades vascas en poco tiempo. Espacios comunes disponibles y dueño dispuesto a ayudar. Accesso para coche mejorable.

nuestra visita al parque nacional fue increíble, y nuestra estadía en Amurrio superó nuestras expectativas. El Txakoli Hostal fue una grata sorpresa, con su ubicación conveniente cerca del pueblo y la estación de tren. Definitivamente volveremos.

la privacidad fue invadida

Mejor que las imágenes! Los alrededores del hotel eran impresionantes, con hermosas vistas a la ciudad y suficiente espacio para relajarse al aire libre. Además, la ubicación era ideal para mí, ya que estaba a poca distancia en coche tanto de Vitoria como de Bilbao, lo cual era perfecto para mis viajes de negocios. aprecié la amabilidad del propietario, quien ofreció una degustación de su txakoli casero, una experiencia auténtica de la región.

Increíbles vistas desde la casa y un gran terreno para que los niños jueguen! El dueño es super amable y te invita a probar su delicioso txakoli casero. ¡Muy recomendable!

Ubicación ideal, vistas maravillosas, propietario amable, cerca de estación de tren, ambiente relajante.

No hay nada que no me haya gustado.

El sitio es muy relajante y está muy limpio. Está muy cerca del pueblo para ir andando y la estación de tren también está cerca. El dueño es muy amable y tiene un humor característico. Lo recomiendo y nosotros repetiremos.

No hay nada malo que decir. 😊

Mi estancia en El Txakoli fue realmente agradable. Pasé unos días allí con mi familia y disfrutamos de una habitación amplia y un baño igualmente espacioso. Además, teníamos a nuestra disposición un salón con todo lo necesario para cocinar, incluyendo fregadero, frigorífico y microondas. ¡No se puede pedir más! Las vistas desde la casa eran maravillosas y los niños tenían mucho espacio para jugar en la parte de atrás. El dueño fue muy amable y nos hizo probar el txakoli que él mismo elabora. valoramos positivamente su disposición para resolver dudas y apoyar nuestras propuestas. En resumen, nos sentimos como en casa y definitivamente repetiremos.

De verdad que lo aconsejo.

Mis mejores aspectos sobre este hotel fueron la ubicación y el personal. La ubicación era perfecta, ya que estaba cerca del centro de la ciudad y también había una estación de tren cercana. Además, el hotel estaba ubicado en un lugar tranquilo y relajante. El personal fue extremadamente amable y servicial, siempre dispuesto a responder a mis preguntas y hacer recomendaciones sobre qué hacer y ver en la ciudad.

En cuanto a los peores aspectos, no tengo nada que decir. Todo en este hotel cumplió con mis expectativas y no tuve ninguna queja.

nuestra estancia en el txakoli hostal en amurrio superó nuestras expectativas. las vistas desde la casa eran maravillosas y disfrutamos de un terreno amplio para que los niños jugaran. el dueño fue muy amable y nos hizo probar el delicioso txakoli que él mismo elabora. el ambiente relajante y limpio nos hizo sentir muy cómodos. estuvimos cerca del pueblo y la estación de tren, lo cual fue muy conveniente. el propietario siempre estuvo dispuesto a ayudarnos y resolver cualquier duda que tuviéramos.

lo único negativo fue que reservamos una habitación con 3 camas y al llegar solo había 2. se lo mencionamos al dueño pero no nos dio ninguna solución más que juntar las camas y dormir los tres en un espacio reducido.